La capital del Atlántico vivió una noche de caos eléctrico cuando al menos seis subestaciones dejaron de funcionar, afectando a miles de hogares y negocios. El apagón masivo se produjo en plena hora pico, dejando a los ciudadanos atrapados en medio de semáforos apagados, tráfico colapsado y barrios completamente a oscuras. Air-e confirmó que trabaja en maniobras de recuperación mientras los afectados esperan respuestas claras.