La DIAN (Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales) vive una grave crisis laboral: más de 700 funcionarios de carácter provisional corren el riesgo de perder sus empleos. Todo comenzó con una avalancha de tutelas presentadas por aspirantes incluídos en las “listas de elegibles” del concurso público de 2022, lo que obliga a la entidad a nombrar a estos ganadores y, por ende, despedir a trabajadores provisionales con años de experiencia.
Hasta la fecha, se han emitido 42 sentencias y se estudia el retiro de 702 provisionales y 23 encargados. Se evalúa también la protección constitucional de otros 872 empleados .
La DIAN ha instado a sus directores de oficina a ejecutar despedidos con “acompañamiento empático” y respeto hacia quienes se desvinculan; además, ofrece capacitaciones y asesoría para que estos empleados puedan presentarse a concursos estatales o iniciar emprendimientos.
El impacto emocional es evidente: funcionarios confiesan sentirse “desgastados, desmotivados y sin ánimos” . Por su parte, líderes sindicales califican los hechos como una “masacre laboral” y “desorden injusto”, señalando que varios fallos se otorgaron sin notificar a los trabajadores incumbentes .
En reacción, ha habido protestas en ciudades como Medellín, Bucaramanga y Barranquilla, y los sindicatos, entre ellos SINEDIAN y SEDIAN, han pedido la intervención de la Corte Suprema y unificar criterios judiciales . Algunos tribunales ya han anulado decisiones cuestionadas mientras se revisan recursos.