El Salvador está a punto de convertirse en el nuevo epicentro deportivo de Latinoamérica gracias a un ambicioso proyecto financiado por China: la construcción del estadio más moderno de la región.
La obra contará con tecnología de última generación, diseño futurista y capacidad para decenas de miles de espectadores. Tendrá zonas VIP, pantallas gigantes 360°, conectividad total y un sistema de energía sostenible que lo pondrá a la vanguardia mundial.
Este megaproyecto es parte de la cooperación entre ambos países y promete convertirse en un símbolo de desarrollo, turismo y proyección internacional para El Salvador.
Los trabajos de construcción ya están en marcha y, según las autoridades, el estadio podría estar listo en pocos años, justo a tiempo para albergar grandes eventos deportivos y conciertos de talla mundial.